Procrear presente en el 27th World Congress on Controversies in Obstetrics, Gynecology & Infertility (COGI).

La Dra. María Gou y el Dr. José Ignacio Mazzanti viajaron a Paris los días 21, 22 y 23 de noviembre para participar del 27th World Congress on Controversies in Obstetrics, Gynecology & Infertility (COGI).

Este Congreso Mundial es un ‘congreso conceptual’ que trata principalmente sobre temas controvertidos en el amplio campo de la Salud de la Mujer, en el formato de debates y charlas, y que permite un amplio tiempo para la interacción entre los oradores y los participantes. El congreso brinda a los líderes de opinión clave de todo el mundo la oportunidad de debatir eficazmente los dilemas clínicos y terapéuticos y otros problemas clave que enfrentan los médicos en su práctica diaria.
El Congreso COGI tiene como objetivo proporcionar un foro del más alto nivel para el intercambio científico, educativo y social entre profesionales involucrados en la Salud de la Mujer, y continuar en su misión de promover la investigación y la educación y difundir nuevos conocimientos.
Procrear, siempre presente y apostando permanentemente por la formación continua de su equipo médico-científico.

El Dr. Mazzanti y la Dra. Gou participaron de la Reunión Científica de GINEP los dias 25 y 26 de octubre en Granada.

El Dr. Mazzanti, Director Médico de Procrear y la Dra. Gou, Coordinadora del área de salud de la mujer de Procrear, participaron de la Reunión Científica GINEP, un punto de encuentro para los ginecólogos de asistencia privada en toda España.

Granada albergó los dias 25 y 26 de octubre, la octava edición del evento. La Reunión GINEP es una cita anual ineludible para los ginecólogos de asistencia privada, donde se dan a conocer las últimas actualizaciones y se ponen en común ideas sobre los temas de mayor relevancia en el ámbito de la ginecología.

En el programa científico participaron profesionales y expertos de reconocido prestigio a nivel nacional.

No me quedo embarazada… Estudio de fertilidad

Por Julio Quintana

Fuente: Revista ANACER, 2019 – Ejemplar nº

El primer elemento a tener en cuenta es la capacidad reproductora de la especie humana. A esta capacidad la denominamos fecundidad y se mide con una tasa en la que intervienen tanto fenómenos genéticos como ambientales.

La misma puede ser la fecundidad general que considera el número de nacimientos por cada mil mujeres en edad fértil en un año o referida a lo largo de la vida reproductiva de la mujer.

La tasa de fecundidad en el ser humano como especie, es baja. La misma se estima en un 20 a 25%  de tasa de embarazo por mes. Si hablamos de la tasa acumulada de embarazos en una pareja fértil con relaciones sexuales frecuentes  y no protegidas, la misma es de una 85% de embarazos al cabo de un año, un 92%  a los 2 años y un 93% a los 3 años. Estaas tasas globales pueden variar de acuerdo a las condiciones específicas de cada pareja , como por ejemplo la edad de sus integrantes, patologías asociadas, calidad del semen, etc. Estas consideraciones son básicas a la hora de que se entiendan las posibilidades reproductivas en cada pareja ya sea espontáneamente o a través de técnicas de reproducción asistida.

En nuestro ámbito denominamos esterilidad cuando una pareja no logra concebir tras un año de relaciones sexuales, en las condiciones expresadas anteriormente. Se considera que alrededor de un 15% de las parejas cumplen esta condición. Como expresamos anteriormente condiciones específicas de la pareja, fundamentalmente la edad de la mujer, pueden aconsejar la consulta especializada antes de transcurrir un año sin embarazo.

El primer elemento a tener en cuenta para el estudio de una pareja o mujer que nos consulta por deseos reproductivos es si se trata de una pareja heterosexual, homosexual o una mujer sola, ya que en estos casos muchas veces no hay patología que justifique el hecho de no quedarse embarazada.

Debe realizarse una completa anamnesis de la mujer o pareja investigando los antecedentes familiares, personales, obstétricos, ciclo mestrual, hábitos tóxicos en especial tabaquismo y drogas, medicación que recibe, etc. En el hombre se interrogará también sus antecedentes y la existencia de hijos o embarazos con otras parejas.

Los hábitos sexuales y la frecuencia de las relaciones son elementos importantes a considerar ya que las separaciones prolongadas por temas de trabajo por ejemplo, pueden disminuir las posibilidades reproductivas.

Las causas de la esterilidad pueden ser femeninas, masculinas o mixtas. Por este motivo debemos encarar el estudio de ambos miembros de la pareja en forma simultánea. Se debe iniciar el estudio básico orientados por las posibles causas de fallo reproductivo.

En la mujer es fundamental tener en cuenta la edad, la tasa de embarazo disminuye sobre todo a partir de los 35 años, acentuándose a partir de los 38, 40 años.

Ovulación: las alteraciones en la ovulación pueden estar fuera o dentro del ovario. En el primer caso se incluye patologías como la endometriosis, quistes, cirugía previa.

El síndrome de ovario poliquístico es un caso especial en el cual hay un trastorno en el metabolismo de los andrógenos a nivel ovárico con predominio de estos sobre los estrógenos.

Su prevalencia es del orden del 5-10% de las mujeres en edad reproductiva y la causa podría deberse a una alteración en la secreción de las gonadotrofinas hipofisarias.

Desde el punto de vista clínico hay alteraciones en la ovulación de variable expresión, en los casos más graves se presenta como anovulación crónica, elementos clínicos y/o paraclínicos de hiperandrogenismo, acompañado de ovarios con estructura poliquística en la ecografía.

Diagnóstico de ovulación: Una mujer con ciclos regulares ovula en el 97% de los casos. Elementos indirectos como la dosificación de progesterona en la segunda fase del ciclo, test de ovulación basados en la detección de pico urinario de LH y seguimiento folicular por ecografía pueden orientarnos a la presencia o no de ovulación.

Fallo ovárico oculto: Clínicamente las pacientes de este grupo presentan ciclos normales, pero tienen una reserva folicular baja. La evaluación de la reserva ovárica se basa en criterios analíticos y ecográficos. En el primer caso, la elevación de los valores de FHS y estradiol en la primera fase del ciclo (más de 20 mUI/ml de FHS) se asocian con malos resultados reproductivos. En cambio, la disminución de la hormona antimüleriana es un elemento muy importante para el diagnóstico de baja reserva ovárica. Los valores normales de esta hormona oscilan entre los 0.7 y 2.1 ng/ml. Según Nelson, variando de acuerdo a la metodología empleada en su dosificación.

Desde el punto de vista ecográfico el número de folículos antrales es un dato muy importante para valorar la reserva ovárica.  Por debajo de 6 folículos antrales se considera baja reserva.

Las causas extraováricas pueden deberse a alteraciones del eje hipotálamo-hipófiso-ovárico u otras alteraciones endocrinas que surgirán de valorar a la mujer desde el punto de vista clínico y hormonal.

Alteraciones a nivel uterino y trompas de Falopio: Intervenciones quirúrgica a nivel pélvico, infecciones, endometriosis entre otras, pueden ser causas de alteraciones anatómicas o funcionales de las trompas, produciendo en muchos casos obstrucción de las mismas.

Las alteraciones uterinas pueden estar al nivel cervical (estenosis por ej) o a nivel uterino como malformaciones congénitas, miomas en especial submucosos, pólipos etc.

Diagnóstico:

En la mujer:

Junto a las anamnesis y al examen clínico consideramos a la ecología vaginal como parte de la valoración inicial de la mujer. De acuerdo a los hallazgos podemos solicitar estudios complementarios como histerosalpingografia, histerosonografia, histeroscopia, laparoscopia, etc.

En el estudio básico de la mujer se incluye otras analíticas. En el estudio básico de la mujer se incluye otras analíticas como: cariotipo, TSH, Prolactina, vitamina D, los que sean necesarios en cada caso particular de acuerdo a las anamnesis y examen clínico.

En el hombre:

Además del interrogatorio y examen físico solicitaremos un seminograma. Los valores normales según la OMS de 2010, son:

Volumen eyaculado 1,5-6mL. pH 7,2-8. Concentración espermatozoides/ml 15 millones. Concentración total de espermatozoides 39 millones. Espermatozoides motiles progresivos (a+b) 32%. Espermatozoides motiles progresivos Totales (a+b+c) 40% Morfología normal 4%

Estudios adicionales en el hombre:

Sangre: Cariotipo, Microdelecciones de cromosoma Y, fibrosis quística.

Semen: Hibridación in situ (FISH), Fragmentación de ADN, Meiosis (Tejido testicular)

Al igual que en la mujer, se pedirán las analíticas complementarias que deriven de cada caso en particular.

El entrenamiento con pesas puede ayudar a reducir los sofocos y la sudoración nocturna de la menopausia (Maturitas)

Las mujeres posmenopáusicas pueden combatir los sofocos y la sudoración nocturna con entrenamientos de resistencia como levantar pesas, según un estudio clínico realizado por la Universidad de Linkoping(Suecia).

«El entrenamiento de resistencia ya se recomienda para todas las mujeres, pero ahora podemos ver que también puede ser efectivo para los sofocos en la menopausia», ha asegurado la autora principal del estudio, Emilia Berin.

La terapia hormonal es el tratamiento más efectivo para los sofocos y los sudores nocturnos, que afectan a la mayoría de las mujeres durante la menopausia. Sin embargo, según han afirmado los investigadores, algunos estudios sugieren que el ejercicio puede ayudar a calmar los sofocos también, pero otros no han encontrado ningún efecto.

Por este motivo, Berin y colegas escogieron al azar a 58 mujeres que experimentaron al menos cuatro sofocos de intensidad moderada a severa o sudores nocturnos diarios. A un grupo se le asignaron 15 semanas de entrenamiento de resistencia y en el otro grupo de control los miembros no cambiaron su actividad física. Ninguno de los participantes hizo ejercicio con regularidad antes del ensayo y tampoco había usado terapia hormonal en los dos meses anteriores.

El régimen del grupo de ejercicios incluyó tres sesiones semanales de 45 minutos con seis ejercicios en máquinas de resistencia y dos ejercicios usando peso corporal. Las mujeres trabajaron con pesas más ligeras durante las primeras tres semanas y luego con cargas cada vez más pesadas.

«Las mujeres menopáusicas (o cualquiera) interesadas en comenzar el entrenamiento de resistencia deben comenzar con cargas más livianas en la primera semana para evitar lesiones», señala Berin.

El grupo de ejercicios tenía un promedio de 7,5 sofocos o sudores nocturnos al día al comienzo del estudio, sin embargo, después de 15 semanas tuvieron un promedio de 4,4 episodios al día. Por su parte, en el grupo de control prácticamente no hubo cambios, pasaron de 6,6 a 6,5 sofocos diarios.

Berin añade que la investigación futura debería determinar si el entrenamiento de resistencia podría beneficiar a otros grupos que sufren sofocos pero no pueden o no toman hormonas, incluidos los pacientes con cáncer de mama y los pacientes con cáncer de próstata que reciben terapia de privación de andrógenos.

Los efectos de los programas de vacunación contra el VPH

Los programas de vacunación contra el VPH reducen sustancialmente las infecciones y las lesiones precancerosas (Lancet)

Fuente: Univadis

Los efectos de los programas de vacunación contra el VPH

Los programas de vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH) han reducido sustancialmente el número de infecciones y lesiones cervicales precancerosas causadas por el virus, según un estudio publicado en The Lancet por investigadores canadienses de la Universidad Laval y del Centro de Investigación CHU de Québec-Université Laval. Los resultados son tan prometedores que ahora es posible prever la eliminación del cáncer cervical como un problema de salud pública en las próximas décadas.

Las infecciones causadas por el VPH se encuentran entre las enfermedades de transmisión sexual más comunes. Ciertas formas del virus pueden provocar verrugas anogenitales, mientras que otras causan lesiones que pueden convertirse en cáncer de boca, garganta, vagina, vulva, ano o pene, y en particular en el cuello uterino. «El VPH se encuentra en casi el 100% de los casos de cáncer cervical», afirma la autora principal, Mélanie Drolet.

El equipo de investigación dirigido por Marc Brisson realizó un metanálisis de 65 estudios en 14 países diferentes que han establecido programas de vacunas contra el VPH en los últimos diez años. Con datos de 60 millones de personas, los investigadores compararon la frecuencia de infecciones por VPH, verrugas anogenitales y lesiones cervicales precancerosas antes y después del lanzamiento de los programas de inmunización.

Su análisis muestra que las infecciones disminuyeron en un 83% entre las niñas de 13 a 19 años y en un 66% entre las mujeres de 20 a 24 años. Para las verrugas anogenitales, la disminución fue de 67% entre las niñas de 15 a 19 años, el 54% para mujeres de edad avanzada. 20 a 24, y 31% para los de 25 a 29 años. Las lesiones cervicales precancerosas también disminuyeron en un 51% entre los adolescentes de 15 a 19 años y el 31% entre las mujeres de 20 a 24 años.

La vacunación de mujeres jóvenes también está produciendo protección de rebaño para los hombres jóvenes. Las verrugas anogenitales entre los hombres han disminuido en un 48% para los de 15 a 19 y en un 32% para los de 20 a 24 años.

«La vacunación contra el VPH es todavía demasiado reciente para medir directamente sus efectos en el cáncer cervical, ya que puede tardar décadas en desarrollarse -puntualiza Drolet-. Pero nuestros análisis muestran que la vacunación está produciendo reducciones sustanciales en las infecciones que causan el cáncer cervical y las lesiones precancerosas».

«Estas reducciones son un primer signo de que la vacunación eventualmente podría conducir a la eliminación del cáncer cervical como un problema de salud pública. Ahora estamos intentando para determinar cuándo podría lograrse la eliminación y qué programas de vacunación y detección podrían ayudarnos a lograrlo más rápido», concluye.

El uso de anticonceptivos orales, una de las principales razones de la disminución de muertes por cáncer de ovario

Las muertes por cáncer de ovario cayeron en todo el mundo entre 2002 y 2012 y se prevé que sigan disminuyendo en Estados Unidos y la Unión Europea, según una nueva investigación que se publica en «Annals of Oncology». La razón principal es el uso de anticonceptivos orales y la protección que ofrecen a largo plazo contra el cáncer de ovario.

Utilizando datos sobre las muertes por cáncer de ovario entre 1970 y el año más reciente disponible de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los investigadores encontraron …Leer mas

Filabanserina o «viagra femenino»

Desde que el viernes pasado se aprobó en Estados Unidos la utilización de la Filabanserina o «viagra femenino«, han sido muchas las personas que han preguntado en Procrear acerca de este nuevo fármaco.

La filabanserina es una droga, que al igual que la famosa viagra en los varones, incrementa el deseo sexual de la mujer. Estados unidos pretende comenzar a comercializarla en el 2016.

Portrait of a beautiful adult happy woman with thumbs up sign over white background

Pero que es lo que hace la filabanserina? La flibanserina modifica tres sustancias químicas claves para el cerebro, aumentando la dopamina y la norepinefrina y disminuyendo la serotonina.

Sprout Pharmaceuticals , laboratorio que ha desarrollado y lanzado la píldora, ha realizado a través de su web y sus comunicados a prensa, una declaración de las contraindicaciones que tiene el medicamento. La Filabanserina puede provocar somnolencia al día siguiente de ser ingerida o efectos secundarios como desmayos y/o disminución de la presión arterial.

Hoy en día, la falta de deseo sexual es la forma más frecuente de disfunción sexual femenina. Esta disfunción se caracteriza por una deficiencia o ausencia de fantasías sexuales y deseo de actividad sexual. Esto provoca múltiples problemas de malestar, malhumor o relacionamiento interpersonal

Aproximadamente una de cada tres mujeres en el mundo sufren por la falta de deseo sexual, y una de cada 10 mujeres está afligida por este tema.

La vacunación contra el virus del Papiloma Humano, podría en las próximas décadas erradicar el cáncer de cuello de útero.

Según han publicado recientemente varios medios de información generalistas y especializados, el cáncer de útero se podría erradicar en 30 años gracias a la vacuna del virus del papiloma humano (VPH).

Consultando a la Dra. Gou, del Centro Procrear, nos comenta que “Vacunar sistemáticamente a las niñas es la mejor prevención que existe frente a este virus que causa el 100% de los casos de cáncer de cuello de útero”

“El Virus del Papiloma Humano es altamente contagioso…Seguir leyendo…

¿Sientes un peso o bulto en la vagina?

¿Sientes un peso o bulto en la vagina?Si éste es tu caso lo primero de todo es no alarmarse porque la mayoría de las veces no se trata de un tumor sino de un prolapso

Un prolapso es el descenso de uno de los órganos pélvicos por la debilitación del suelo pélvico. Normalmente esta situación está provocada por el embarazo y los partos vaginales.

Por lo general suele aparecer en mujeres que ya han llegado a la menopausia, y sólo si han tenido múltiples partos y muy traumáticos se puede ver en mujeres jóvenes.

Tipos de prolapsos

Dependiendo de qué órgano descienda el prolapso se divide en:

  • Cistocele: la vejiga urinaria asoma en la cara anterior de la pared vaginal.
  • Rectocele: el recto (el tramo final del intestino grueso al llegar al ano) desciende sobre la cara posterior vaginal.
  • Prolapso uterino: en este caso es el útero el que desciende asomando el cuello primero y después el cuerpo uterino.
  • Enterocele: las asas intestinales se hernian a través del fondo posterior de la vagina.
  • Prolapso de cúpula vaginal: ocurre en mujeres a las que se les ha extirpado el útero (histerectomía). La vagina, que es un saco ciego, se da la vuelta como si lo pusieran del revés, lo de dentro hacia afuera.

Grados del prolapso

Dependiendo de la gravedad del prolapso, el ginecólogo que examina a la mujer en la mesa de exploración, catalogará el prolapso dentro de un baremo de 4 grados. A cada uno de ellos le corresponde un tratamiento específico:

  • Grado 1 o leve: ligero descenso en el interior de la vagina.
  • Grado 2 o moderado: el descenso alcanza la entrada de la vagina.
  • Grado 3 o grave: el prolapso sobrepasa la entrada de la vagina, la mujer se toca o nota perfectamente el bulto al caminar, sobre todo cuando realiza esfuerzos.
  • Grado 4 o total: el órgano (vejiga, útero o recto) están completamente fuera, incluso en reposo.

Los grados 1 y 2, si ocasionan molestias, deben tratarse con fisioterapia y un cambio de hábitos (dietéticos para corregir, por ejemplo, el estreñimiento, adelgazar, limitar el sobreesfuerzo físico…).

Los grados 3 y 4 generalmente necesitan cirugía para ser corregidos, unas veces con extirpación del órgano que se sale, en el caso del útero, y otras reconstruyendo el defecto con colocación de mallas que compensan el suelo pélvico debilitado, sustituyéndolo por material sintético que hace de nuevo tejido de sostén, como en el caso de la vejiga o el recto.

Si tienes dudas o necesitas una revisión, llámanos (+34 977 326 046) o envíanos un email: info@procrear.es.

Procrear, ciencia al servicio de tu naturaleza.