Una dieta que incluya fruta, verduras, alimentos integrales y algunos tipos de pescado puede reducir el riesgo de tener un parto prematuro. Un grupo de investigación internacional ha hecho este descubrimiento y lo ha publicado en la revista British Medical Journal.
Para el estudio, se evaluaron los hábitos alimentarios de alrededor de 66 000 mujeres embarazadas. Los investigadores también tuvieron acceso a datos sobre su modo de vida, como su nivel educativo, la renta y el peso.
Las mujeres con una dieta más sana tenían un riesgo de parto prematuro un 15 por ciento menor que las que ingerían comida menos saludable, incluso si se tenían en cuenta otros diez factores de riesgo.
«No es nocivo tomar ocasionalmente alimentos menos saludables, pero nuestro estudio muestra que las recomendaciones dietéticas dadas a las mujeres embarazadas son importantes» afirma Linda Englund-Oegge, autora principal e investigadora de la Universidad de Gothenburg (Suecia).
Referencia: British Medical Journal http://www.bmj.com/content/348/bmj.g1446